La pareja (que ha vuelto) escogió un club de ‘strippers’ para celebrar una noche en NYC.
La relación de Kylie Jenner y Travis Scott está más que confirmada. Después de un amorío intermitente —rompieron en 2019 para estar separados hasta ahora—, el rapero y la empresaria parece que se han dado una segunda oportunidad que no dudan en pasear por redes sociales y eventos. Tal es así que la semana pasada Jenner acudía, junto a Stormi, la hija que tienen en común, a un evento en Nueva York donde premiaban al artista. Allí posaban juntos en la alfombra roja y hacían más que evidente que están colados el uno por el otro. Lo que pasaría después de aquel evento te va a dejar ojiplática. Según el medio ‘Page Six’, la pareja dejó al cargo de alguien a su hija de tres años y pusieron rumbo a una cita romántica que acabo en un lugar inesperado: un club de estriptis. En concreto, el pub Starlets, por si quieres ir cuando vayas de visita a la Gran Manzana. Si es que a modernos no los gana nadie.
Allí no estaban solos, dado que se les habría unido el rapero Offset (sí, el novio de Cardi B) y Rowdy Rebel. Eso sí, la máxima de la pandilla habría sido pasar desapercibidos, dado que se situaron en una esquina del local donde pudieron esconderse de los curiosos que veían estupefactos a una Kardashian en dicho sarao. “Estaban en una esquina muy tranquilos y no querían que nadie los mencionara a través del micrófono del local, tampoco quisieron bailes. Solo fueron a disfrutar del ambiente y la música”, aporta la fuente.
Otros famosos en clubes de estriptis (y sus polémicas)
Esta no es la primera vez que una celebridad de tal calibre se adentra en un club donde los fajos, la ropa interior, los desnudos y el ‘twerking’ son los protagonistas de la sala. Sin ir más lejos, en 2020, después de los premios Grammy, la pandilla que la liaba parda en un famoso club de ‘strippers’ era la de Rosalía, Lizzo y Dua Lipa, que retransmitían su estancia en el local a través de Instagram. Su presencia era duramente criticada entonces, dado que los derechos de las mujeres que trabajan en dichos locales nocturnos no siempre están regulados.
Hace unos meses, en febrero, era Lipa la encargada de hacer referencia aquella polémica de la que en su momento no dijeron nada:
“Simplemente pienso que, si eres feminista, también has de apoyar a las mujeres en todos los campos de trabajo. Tenemos que apoyar a las trabajadoras sexuales y debemos creer que dicho puesto es de su elección y están en su derecho […] Se me hace un poco hipócrita, creo, la gente que elige cómo quiere apoyar a las mujeres porque suele ser del modo que les conviene. Esa es otra forma de misoginia que deriva de la mirada masculina”.