En un recorrido por la zona, se constato la paulatina ocupación del área natural
Este 2021 el corredor biológico Chichinautzin cumplirá 33 años de haber sido declarado reserva nacional protegida; sin embargo, todavía sigue en riesgo debido a la invasión, explotación y modificación de su superficie, pues recientemente se detectó que en la parte norte se estaba construyendo una calle.
Según los habitantes del poblado de Santa María Ahuacatitlán de Cuernavaca, algunas personas están tratando de abrir un camino que va de la entrada del paraje El Cajetito a Santa Elena y El Monasterio, con apoyo de Bienes Comunales de esa misma localidad que está integrada por al menos 200 personas.
“Los comentarios de los vecinos es que los mismos comuneros son quienes quieren abrir calles para después vender la tierra, esos son los comentarios que se escuchan”, dijo uno de los vecinos, quien prefirió no dar su nombre por miedo a represalias.
Otro vecino comentó que ningún presidente de comuneros ha cuidado la reserva e incluso, mencionó que el anterior representante fue uno de los más deshonesto, no solo por permitir las modificaciones en el corredor, sino por apoderarse de varios predios en el poblado de Santa María Ahuacatitlán.
“Han sido muy corruptos en mi opinión, el anterior le dice a este -quítate que ahí te voy- en el sentido en que le ha quitado terrenos a personas que son vulnerables en todo el pueblo. Y este señor (el actual) ha cometido varios errores, pero con lo que siempre se justifican son con los usos y costumbres”.
Talaron árboles
Existen algunas casas dentro de la reserva que son toleradas, pues fueron construidas años antes de la declaratoria de corredor biológico, pero deben cumplir con ciertas reglas como tener fosas sépticas, no cambiar el uso de suelo y estrictamente no cortar árboles.
Entre cada vivienda existen pequeños senderos que son justamente los que han sido ampliados para formar una calle, incluso se han cortado árboles para ese fin, lo que tiene molestos a los residentes del lado del paraje El Cajetito.
Sin embrago, mediante las presiones e intimidaciones, un grupo de civiles siguen abriendo camino, así que los vecinos alertaron de esto a la Comisión Nacional de de Áreas Naturales Protegidas (Conanp).
El pulmón de Cuernavaca
Felipe Martínez Mesa, integrante de la Conanp, aseguró que la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) ya está investigando el caso para evitar que se siga afectando al medio ambiente.
Y es que este lugar de la reserva ecológica en la parte norte de la capital y hacia Huitzilac es una zona de gran captación de agua para el valle de Cuernavaca.
“Aquí nos encontramos en una zona caracterizada por encinares de diversas especies, fresnos y algunas otras josas que le dan una fragancia y una captación de agua bien importante para la región”.
También en este lugar existe un gran número de animales que son endémicos de la zona.
“En este lugar hay una gran diversidad de especies endémicas del sitio como el gorrión serrano y el conejo teporingo, que son especies sensibles e importantes. Especies en peligro en este lugar no hay, pero hay algunas que están en categoría de protección como la gallina de monte y otras aves”.
El presidente de Bienes Comunales, Juventino Jiménez, aseguró que él y los integrantes de esta organización sí se preocupan por cuidar el corredor y que incluso han estado colaborando en los programas de reforestación cada dos años.
Dijo que incluso se han colocado algunos carteles para que las personas no compren problemas en este lugar y aseveró que existe coordinación con los vecinos para su protección, aunque también afirmó que no sabía quién trató de hacer esa calle.
La reserva del Chichinautzin esta conformada por más de 65 mil hectáreas que incluye el parque de Lagunas de Zempoala con más de cuatro mil hectáreas y el Tepozteco con más de 23 mil hectáreas.
Abarca 15 municipios; 12 del estado de Morelos, uno del Estado de México y dos de la Ciudad de México. Fue declarada reserva el 30 de noviembre de 1988.