Luego de que los gobiernos de la Ciudad de México y el Estado de México determinaron regresar al semáforo rojo; en Morelos, el sector restaurantero no ha registrado un incremento real, en la afluencia de turistas en el sector.
Apenas si fue un alza del 10% en el fin de semana, reportó la dirigencia de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (CANIRAC Morelos).
En entrevista, la presidenta del organismo empresarial, Griselda Hurtado, manifestó su preocupación por que se carece de control en torno a los horarios y el funcionamiento de los bares y las casas de fin de semana, por parte del Ayuntamiento de Cuernavaca.
Indicó que la preocupación radica en que la operación de estos lugares registra una sobresaturación y cuentan con horarios ampliados que se dan, sin la sanción correspondiente de la autoridad municipal, en medio de una contingencia sanitaria por el COVID-19, que puede incrementar los casos de contagio “importados”. Ello, a diferencia del sector, que está sobre regulado y bajo vigilancia constante por parte de los tres niveles de gobierno.