Los actos delictivos relacionados con el crimen organizado no son consecuencia de falta de servicios como alumbrado público o pavimentación, explicó el presidente municipal de Cuernavaca, José Luis Urióstegui Salgado.
Ante los casos de violencia que recientemente han ocurrido en los poblados de Ahuatepec y Ocotepec, el edil capitalino explicó que de acuerdo a los reportes presentados por la Secretaría de Protección y Auxilio Ciudadano (Seprac), los tres casos presentados dejaron como resultado dos occisos así como dos personas más reportadas como heridas de gravedad.
El alcalde explicó que se deberá diferenciar la “violencia común” de la que es ejercida por parte del crimen organizado cuando ésta ocurre en personas específicas, es decir, los objetivos específicos normalmente son relacionados con una venganza personal o delincuencia organizada pues la pugna por los territorios de cada grupo delictivo es el motivo de muchos decesos.
Reconoció que en estos casos en particular se podría tratar de un crimen directo a un objetivo en específico puesto que el modus operandi que se ha detectado es que motociclistas persiguen a su víctima para posteriormente quitarle la vida.
Al ser cuestionado sobre si tiene que ver que las zonas dónde ocurrieron estos crímenes se rigen por usos y costumbres, Urióstegui Salgado dijo que la violencia ejercida en poblados como Ocotepec y Ahuatepec no tiene relación con sus formas de gobierno.
“No hay impedimento en Ahuatepec, hacemos patrullaje, en Ocotepec sí, creo que no tiene nada que ver con la restricción sino con el asentamiento de personas dedicadas a la delincuencia organizada en estos lugares, que también en ocasiones buscan que las autoridades elegidas por cada uno de los pueblos les proteja, hay una cierta complicidad”, explicó el edil.
Pese a que la titular de la Seprac dijo que los crímenes sí se podía deber a la falta de servicios públicos, ya que son zonas que han sido abandonadas, el edil capitalino señaló que ciertamente hay servicios públicos que inciden en la mejora de la prevención del delito y la seguridad pública, pero no son determinantes en el caso del crimen organizado.
“No es la falta de servicio que persigan a una persona, que la alcancen y la priven de la vida, no tiene nada que ver con esto”, finalizó.
