Nuestro metabolismo y nuestro estómago suelen ser algo quisquillosos para procesar ciertos productos; hay algunos elementos que podrían inflamarnos y mantenernos en un estado de hinchazón por el resto del día
El desayuno es la primera comida que se hace al día, por lo que se considera la más importante. Después de las horas de ayuno que pasamos al dormir, ingerir alimentos durante las primeras horas de la mañana es fundamental y puede impactar de forma considerable nuestra salud, ya sea a corto o largo plazo. Decidir ingerirlo o no ingerirlo podría significar grandes cambios en el funcionamiento de nuestro metabolismo y de nuestro organismo en general.
Algunos de los beneficios de desayunar es que esta acción incrementa los niveles de azúcar en nuestra sangre, lo que ayuda al cuerpo a funcionar con mayor efectividad. Sin embargo, también es importante considerar que elegir el desayuno adecuado es clave para mejorar nuestro rendimiento físico e intelectual, pues solo la cantidad correcta de nutrientes nos permitirán concentrarnos y seguir con nuestras actividades cotidianas.
¿Por qué hay alimentos que debemos evitar?
Al ser el primer alimento después de horas de sueño, nuestro metabolismo y nuestro estómago suelen ser algo quisquillosos para procesar ciertos productos. Por ejemplo, hay algunos elementos que podrían inflamarnos y mantenernos en un estado de hinchazón por el resto del día. Probablemente conozcas la sensación de apenas terminar con el último bocado y ya sentir que podrías necesitar prendas una talla más grande.
Sin embargo, esto no debería ocurrir de manera cotidiana y solo podría significar que estamos comiendo de forma equivocada. La hinchazón en el vientre podría deberse a los gases que se producen en nuestros intestinos durante la digestión. Estos, a su vez, son producto de la descomposición de carbohidratos, proteínas y azúcares; aunque también puede deberse a una forma veloz de ingerir la comida y hasta de no tener una técnica correcta de masticado.
Alimentos que inflaman tu estómago
Ingerir grandes cantidades de quesos salados o carnes procesadas, además de favorecer la hinchazón, también provocan retención de líquidos, hipotensión o enfermedades renales. Si deseas consumir alguno de estos productos, solo asegúrate que el sodio que contienen sea inferior a los 500 miligramos por porción. Los hotcakes, aunque suenen como la opción más deliciosa, también pueden causarte ciertos problemas, especialmente si los mezclas con algún jarabe o mermelada, pues el exceso de azúcar empeorará tu condición por completo.
El pan, sin importar si es salado o dulce, contiene carbohidratos refinados que el cuerpo almacena como azúcar, lo que puede elevar el riesgo de padecer diabetes tipo dos, además de inflamación y otros problemas en el estómago. Ingerir grandes cantidades de fruta también podría implicar una situación que deseas evitar debido a sus altos contenidos de agua y fructuosa, un tipo de azúcar que muchas personas no pueden digerir. Finalmente, los lácteos también pueden ser la causa principal de tus problemas debido a que tu estómago carece de las enzimas necesarias para descomponer la lactosa.
Fuente: El Heraldo de México